sábado, 9 de agosto de 2014

NO AL MALTRATO ANIMAL.

El maltrato a un potro provoca una avalancha de indignación y solidaridad.

El animal, que permanecía junto a la carretera de Alfajeme (San Andrés del Rabanedo) con dolorosas heridas a causa de una cabezada muy apretada, ya ha sido liberado del sufrimiento. La Protectora de Animales realiza un seguimiento y apura los trámites para que el ejemplar vaya a un centro especializado.

 

La voz de alarma sobre la situación de maltrato a un pequeño potro se originó en las redes sociales. Y una fotografía bastó para provocar una reacción en cadena que, de momento, ya ha conseguido que el animal esté libre de la peligrosa combinación que suponía una cabezada demasiado ceñida y la absoluta dejadez de sus dueños.

El potro llevaba varios días en una finca aledaña a la carretera de Alfajeme (municipio de San Andrés del Rabanedo, muy cerca de León). Como se aprecia en la imagen, la sucesión de días con una cabezada mal colocada y muy apretada estaba causando graves heridas al corcel, al borde de una peligrosa infección. La suerte quiso que alguien con conocimiento veterinario lo viera y decidiera llamar la atención sobre su caso.

Todo comenzó con la fotografía en el perfil de Facebook del Hospital Veterinario Ferral. "El animal sin documentación. El propietario sin nada que perder", se lamentaba en el comentario de una imagen que, por su real crudeza, causó en pocas horas una avalancha de solidaridad con el estado del animal. Bien poco pasó antes de que algunos, además de expresar su malestar o su desolación por este caso concreto, se pusieran manos a la obra.

Entre ellos, Carmen Caríssimo, presidenta de la Asociación Protectora de Animales de León-Argos. De la mano de un veterinario experto en ganado caballar ya visitó la finca esa misma tarde del viernes, así como habló con su propietario hasta conseguir, no sin dificultades, que al menos le fuera retirada cuanto antes la cinta que le oprimía con tanta fuerza el hocico. "Desde entonces está en mucho mejor estado, ya en compañía de su madre y mostrándose contento y parece que sano" en otra finca, ha explicado a iLeon.com. No pasan muchas horas sin que se le vaya a visitar, aunque sea a distancia, para comprobar que todo va mejor, como parece.

De todos modos, el riesgo de infección es elevado. La intención de la responsable de la Protectora ahora es consultar la situación legal de un animal que no deja de ser propiedad privada y bien con alguna acción judicial o bien a través de negociación, conseguir llevarse al potro a un centro especializado y realizar una revisión de su estado. Si todo sale bien, quizá pueda ser al centro ecuestre Caminando con Caballos, situado en Sanfelismo, el cual ha anunciado la firma en unos días de un convenio con la Protectora Argos "para ceder sus instalaciones y sus conocimientos del mundo ecuestre con el objetivo de facilitar una salida a caballos en situaciones difíciles, de abandono, maltrato o caballos que se encuentren en situaciones que no consideramos dignas para su vida y su bienestar".







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